Ofeelia detrás de escena…
Hola!! si estás leyendo ésto es porque querés saber un poquito más sobre Ofeelia , asique aquí te cuento:
Me llamo Barby y soy la creadora de Ofeelia; como buena emprendedora, también soy diseñadora, vendedora, productora ,modelo y muuuchas tareas más!
Hace unos 10 años estaba dando clases de teatro en escuelas y terminando la facultad (sí, estudio y hago teatro desde los 12 años, soy Licenciada en Actuación, me recibí en la UNA) cuando una amiga vino con un vestido y me dijo: “todo el mundo me lo halaga , hagamos una versión parecida y vendamoslo en el local de unas amigas”. Me copó la propuesta. Siendo nieta de turcos, que siempre trabajaron con tela e hija de comerciante, intuí que la cosa podía salir bien.
Al principio fue como un juego: fuimos al Once a comprar tela, cortamos el vestido, produjimos unos 12, los vendimos en locales, luego sumamos una remera, otro vestido y así fue creciendo lo que se llamó “LAS LORQUEANAS” (sí, por Federico García Lorca). Tiempo después me cansé de dar clases y pensé qué otra cosa podía hacer e intuí ,otra vez, que lo de la ropa podía funcionar. Decidí encarar sola el nuevo proyecto y pensando nombres volvió a surgir lo teatral . Esta vez Shakespeare. Ofelia. Ofelia de Hamlet. Se preguntarán porqué le agregué otra “E”, pues por numerología. Alguien me dijo que tenía que sumar las letras y dar 8 que es la abundancia…y Ofeelia cuadraba perfecto!
Ya con Ofeelia de la mano, los primero años fueron muy movidos… andaba con una valijita de acá para allá (me tomaba el tren Roca a zona sur, con el San Martin hasta San Miguel, visitaba oficinas de bancos y escuelas); iba con los percheros a ferias que a veces funcionaban y a veces no. En el primer monoambiente que alquilé no tenía donde poner la ropa y se me venía el placard abajo . Mis amigas (las mejores del mundo) siempre estaban disponibles desinteresadamente para sacarse fotos en cualquier lado; mi mamá me sacaba fotos en el balcón.
En un momento, la valijita pasó a ser una valija más grande. El placard pasó a ser una habitación donde recibir a las clientas. Tiempo después armé una web. Me mudé a un espacio más amplio (el showroom actual). De a poco empecé a incorporar gente para que me ayudara en las tareas, pues sola ya no daba abasto. Se sumó Bea, mi suegra , excelente vendedora y organizadora . Luego Belén, mi prima, super canchera con las redes y con ideas novedosas. Convoqué diseñadoras gráficas para darle impulso a las redes, y así de a poco se fue conformando la Ofeelia que ven ahora.
Como habrán notado, fue un proceso largo, trabajoso y de mucho esfuerzo; con sus altibajos , alegrías y frustraciónes. Hoy puedo decir que estoy contenta y orgullosa de vivir de algo que yo misma creé. Que , al ser mi propia jefa, puedo administrar mi tiempo entre mi trabajo y el teatro, que es mi pasión.
Hace poco comprendí que con Ofeelia también estoy dando un servicio a los demás… un servicio que me resuena especialmente porque se conecta con mi infancia . De niña era gorda y me costaba conseguir ropa; realmente lo padecía. Asique, al pensar en como quería que fuese Ofeelia , nunca dudé de que tenía que ofrecer talles reales e inclusivos ( confieso que a veces me siento mal por no tener más talles pero, la inversión muchas veces limita el deseo).
Para resumir : Ofeelia para mi es ABUNDANCIA.
Abundancia de amor, de arte, de proyectos de sueños, de creatividad, de libertad ; de colores y texturas. De conexión entre mujeres, de empatía, de empoderamiento.
Me gusta sentir que con mis prendas colaboro a que cada una se sienta cómoda como es; que ayudo, de alguna manera, a romper con esa idea limitante de que hay un estándar de belleza o patrones físicos a seguir. Al estar en contacto con ustedes todos los días confirmo y reafirmo el valor de nuestros cuerpos y el derecho a que sean respetados.
Las invito a conocer los diseños de Ofeelia deseando que les gusten tanto como a mi me gusta hacerlos.
Les agradezco y las abrazo.